Fisioterapia Manual.
La fisioterapia manual se define como el conjunto de técnicas o abordajes de carácter terapeútico cuya característica común es el uso de las manos, tanto de manera independiente como mediante el uso de instrumental complementario. Su campo de actuación en el tratamiento de patologías neuro-músculo-esqueléticas es muy amplio y reconocido, incluyendo un abanico de técnicas específicas tales como: masaje (en sus distintas modalidades), movilizaciones articulares, neurodinamia, inducción miofascial, estiramiento analítico, técnicas con impulso articulares, drenaje linfático manual…
Se podría afirmar que la terapia manual constituye el abordaje clásico en el campo de la fisioterapia, pues la mano ha sido en buena media la herramienta esencial del fisioterapeuta en sus orígenes. La investigación permanente ha logrado no sólo refinar los procedimientos heredados del pasado, si no que ha facilitado la aparición de nuevas técnicas, así como ha permitido evidenciar los mecanismos fisiológicos de actuación de las mismas. Aún hoy, la fisioterapia manual se erige como uno de los pilares esenciales del abordaje fisioterapeútico en multitud de disfunciones.
Masoterapia (masaje)
combinación de diversas manipulaciones sistemáticas sobre los tejidos corporales basadas en el movimiento (rítmico) y la presión, con intencionalidad terapeútica, tales como: masaje transversal profundo, masaje miofascial…
Estiramientos analíticos o globales
Aplicación sistemática de tracciones con objeto de elongar partes blandas (músculos, ligamentos, cápsula articular…) ganando así flexibilidad y rango articular. Se pueden clasificar como analíticos (estiramiento de estructuras individuales), globales (elongación de varias estructuras en cadena o al mismo tiempo), activos (mediante la activación de otro músculo) o pasivos (mediante una fuerza externa)
Neurodinamia
Conjunto de técnicas manuales que permiten evaluar y tratar las disfunciones asociadas al sistema nervioso periférico y las meninges, tales como el dolor neuropático, alteraciones de la sensibilidad y los reflejos miotendinosos, disfunciones articulares, alteraciones del tono muscular… mediante la movilización pasiva (fundamentalmente el deslizamiento pero también el estiramiento moderado) del tejido neural con objeto de liberarlo de eventuales atrapamientos.
Inducción miofascial
Técnica consistente en la compresión mantenida y estiramiento suave del tejido fascial, con objeto de inducir el movimiento natural del colágeno y así liberar las restricciones y atrapamientos patológicos asociados a este: articulares, neurales…A diferencia del estiramiento que fuerza el tejido, la inducción miofascial lo estimula.
Movilizaciones articulares
Técnica consistente en la movilización de las distintas articulaciones del sistema musculoesquelético, respetando escrupulosamente la biomecánica exacta de cada una de ellas, que puede ser activa (el paciente realiza por si mismo el movimiento), pasiva asistida (el paciente es ayudado por el terapeuta) o pasiva forzada (el terapeuta, sin ayuda del paciente, obliga el movimiento articular restringido para liberarlo); y que tiene como finalidad, recuperar o mantener el movimiento natural del cuerpo, con todo lo que ello comporta en términos de salud.
Técnica con impulso
Técnica característica de la osteopatía basada en la aplicación de impulsos de alta velocidad y corta amplitud, que conducen las estructuras articulares más allá de los límites fisiológicos convencionales pero sin vulnerar los límites anatómicos. Con ello se consiguen resultados a menudo inmediatos en las restricciones de la movilidad o el dolor e incluso con efectos neurales y viscerales.
Drenaje linfático manual
Modalidad de masaje suave, lento y rítmico que dirigido a los vasos linfáticos, moviliza los líquidos (linfa) que se acumulan en el espacio entre células (espacio intercelular), favoreciendo así la evacuación de sustancias de desecho, que de estancarse, provocarían la conocida hinchazón denominada linfedema.